Como os dije, esta mañana me he dirigido a la presa de La Serena, a la zona entre Puebla de Alcocer y el puente de Siruela. Cuando salía de casa, a las 7:45, comenzó un llovizneo que no me ha abandonado durante toda la mañana.
He comenzado a pescar siendo casi de noche y lo he hecho con un señuelo reciclado, una rapala original, especial Serena, pero sin babero porque lo perdió un día que se me enganchó en una rama; así lo aprovecho como paseante y con buen resultado pues, aun sin ver las ondas que producía en el agua, he tenido la primera picada... un blass de unos veinte cms., después varios ataques más, incluído algunos de barbos, pero sin suerte hasta que entró el primer bass decente.



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Después, y viendo que algunos barbos se cebaban por la orilla, he cambiado a un hopper popper y aunque los barbos no han entrado, al momento ha entrado este otro bass, también muy bonito.



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Como el aire aumentaba he decidido usar una rapala especial Serena y han entrado varios blases más pero todos de unos veinte cms. hasta que he clavado este barbo.



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Más adelante he visto una pequeña playita y he pensado "aquí debe haber algo"; he lanzado hacía la orilla y he notado una picada muy suave. He clavado y he notado que no era barbo. Pronto he visto esta preciosa carpa que ha luchado lo indecible hasta rendirse.



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El tiempo empezó a empeorar y me volví hacia el coche; durante el camino de vuelta otros blases pequeños y otros dos barbos.
Nunca tires los señuelos que se estropeen, pueden tener otra utilidad.

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El pasado sábado me acerqué de nuevo a Orellana; había quedado con un grupo de amigos que venían desde Navalcarnero (Madrid): Use, Isaac y Santi, y desde Puertollano (Ciudad Real): David, Miguel y Paco. Habíamos quedado en pescar desde "pato", así que buscamos una buena zona y hacia allá nos dirijimos.
Nos metimos enseguida en el agua y notamos que ya se va enfriando, eso hizo que al principio los blases estuvieran poco activos y entraran a los señuelos moviéndolos muy lentamente por el suelo. El que más peces nos dio fue la Curly Tail de zoom. No eran peces muy grandes pero sí salió alguno de buen tamaño como el que sacó Use sobre las 9:30 de 1,090 Kg.
La jornada transcurrió sacando peces, black bass y lucios y fue entretenida. Ya, por la tarde y a una spinner de color blanco, también recogida de manera lenta y con parones, el amigo Miguel enganchó un buen "tocho" de 2,400 Kg que fue la mayor alegría de la jornada.
Entre mañana y tarde tuvimos un descanso para tomar un "reconstituyente" con jamón, tortilla, chorizo, salchichón y alguna morcillita de hígado de "Yegua" que nos hicieron recuperar fuerzas.
En fin, una jornada estupenda, con buena gente y, por supuesto, todas las piezas fueron devueltas al agua.
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